«A ejemplo de nuestra Madre crezcamos en las virtudes» fue el lema con el que se celebró la fiesta patronal de Nuestra Señora de Lourdes. La ceremonia estuvo presidida por el obispo diocesano Vicente Bokalic Iglic quien señaló que es tiempo de «recuperar la humanidad y volver a poner la confianza en Dios».
Concluida la procesión con la imagen de la Madre María en la advocación de Lourdes, monseñor Bokalic expresó en su homilía: «Quiero recordar el primer milagro de Jesús en Caná de Galilea, ante una situación particular su madre le dijo a los discípulos ‘Haced lo que él os diga’ y ante el manifiesto de su gloria, creyeron en él».
«Nosotros peregrinos transitamos muchas dificultades -continuó- y nos preguntamos que quiere Dios de mi. Cuántas veces se creen débiles, impotentes y abandonados por él e incluso exclaman afligidos por qué a mí si sólo hago el bien. En esos momentos de tiniebla y oscuridad, es necesario que escuchemos la palabra de Dios».
También puntualizó: «Es cierto que las situaciones más difíciles son cuando hay que afrontar enfermedades de un ser querido, por ello se debe tener presente la palabra de María porque a pesar de no creer o dudar, Dios va a obrar en nuestros corazones».
«Dios tiene sus propios tiempos y nosotros vivimos en la cultura del ya, a veces no tenemos las respuestas inmediatas y eso no quiere decir que nos abandona, al contrario, él siempre se muestra misericordioso», explicó el prelado.
Asimismo destacó que es tiempo de posar la confianza en Dios y no dejar que les quiten la esperanza.
«Dios nos dejó a la madre de su hijo para llenarnos de esperanza y en las horas más difíciles es ella quien nos acompaña. Por ello, en cada rostro de los enfermos descubramos a Jesús para volver a creer y decirle me viniste a visitar con toda nuestra fe», dijo Bokalic.
Finalmente instó a rezar por los enfermos y principalmente la gente que vive en su entorno, enfermeros, médicos, cuidadores, para que éstos no sean tratados como un objeto más. «Necesitamos recuperar la humanidad y cada gesto y obra de amor que realicemos será el camino para encontrarnos con el Señor».
