Este domingo, mientras se inauguraba el Museo del Holocausto en Ámsterdam, se desarrollaron violentas protestas protagonizadas por seguidores del grupo terrorista Hamas
La manifestación también se dio durante la visita del presidente israelí, Isaac Herzog, quien pidió que se rece por la paz y por la liberación inmediata de los rehenes tomados por Hamas en su ataque del 7 de octubre y que siguen en manos de los terroristas palestinos, luego de asistir a la inauguración del museo.
“El odio y el antisemitismo están floreciendo en todo el mundo, y debemos combatirlos juntos”, dijo Herzog en su discurso.
En una plaza cercana, los manifestantes coreaban “Alto el fuego ya” mientras sostenían banderas palestinas.
Cerca del nuevo museo, un grupo de personas que portaban banderas israelíes y fotografías de rehenes se enfrentó a algunos de los manifestantes gritando “vergüenza debería darles”, y agentes de policía acudieron para rebajar la tensión.
Un portavoz del presidente declinó hacer comentarios.
Antes de convertirse en presidente, un cargo en gran medida ceremonial, Herzog dirigía el Partido Laborista de Israel, que históricamente ha abogado por la paz con los palestinos.
El museo informó a los medios de comunicación de que había invitado a Herzog antes del ataque de Hamas y la posterior ofensiva israelí en Gaza.
En un comunicado reconoció que la asistencia del presidente suscitaba dudas, pero que representaba a la patria de los neerlandeses supervivientes del Holocausto que emigraron a Israel.
La Alemania nazi asesinó a seis millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial. El Israel moderno se fundó en 1948 como refugio seguro para los judíos.
El Rey Willem-Alexander se reunió con Herzog este domingo.
134 rehenes que continúan secuestrados en Gaza desde el 7 de octubre de 2023, cuando cientos de terroristas de Hamas atacaron Israel en una operación coordinada y simultánea que incluyó ataques aéreos y la infiltración de cientos de terroristas al sur de Israel desde la Franja de Gaza.
Además de llevarse cientos de rehenes, asesinaron a 1.200 personas en un raid sanguinario: incendiaron casas con gente adentro, ejecutaron familias enteras, decapitaron y calcinaron bebés, mutilaron y violaron sistemáticamente a sus víctimas.
Ese día, los terroristas de Hamas desfilaron con cuerpos de civiles y soldados por las calles de Gaza.
Las principales víctimas fueron las poblaciones de los kibbutzim y los cientos de jóvenes que asistían a un festival de música por la paz, el Supernova, cerca del límite con la Franja.
En total, en cinco meses de guerra, el grupo terrorista Hamas asegura que en la Franja de Gaza murieron más de 30.900 personas.
(Con información de Reuters)
Fuente Infobae