Buena presentación de Independiente, que cambió la cara y se llevó un triunfo muy importante frente al Inter de Porto Alegre, en condición de local. El conjunto de Avellaneda se impuso por 2 a 1 en un partido sumamente difícil, que recién pudo definirlo con una pelota parada, a pesar de haber sido superior en gran parte del encuentro. Ahora, los de Antonio Mohamed deberán defender el gol de ventaja en Brasil, donde los “Gaúchos” tratarán de dar vuelta la historia en lo que será la segunda final de la Recopa Sudamericana, donde el gol de visitante no vale doble.
El primer tiempo fue con Independiente mostrando una actitud diferente, en comparación con la que había mostrado hace algunos días en la Suruga Bank frente al Jubilo Iwata. El arranque fue más que aceptable, ya que el equipo atacó y creo situaciones claras. Sin embargo, el visitante se fue acomodando y golpeó en la primera que tuvo, a través de un gran anticipo de Leandro Damiao, tras un desborde por la derecha. No obstante, el local no se quedó y Maximiliano Velázquez apareció rápidamente de cabeza para poner la igualdad en Avellaneda.
En el complemento el juego se equilibró, porque no había tantas acciones, aunque siempre Independiente fue un poco más. De esta manera, el local fue más claro y obtuvo la ventaja por intermedio de Marco Pérez, quien de tiro libre (y con un desvío en Maximiliano Velázquez) estableció el 2 a 1. A partir de ahí, cualquiera pudo haber convertido, producto de que “El Rojo” tuvo para ampliar la diferencia, mientras que el visitante estuvo a un paso, que no se dio por Hilario Navarro y la falta de puntería, de alcanzar el empate.
La figura del partido fue el equipo de Independiente, no por haber tenido un rendimiento superlativo, sino porque cambió la imagen mostrada hace unos días ante el Jubilo Iwata, donde mostró errores en todos los aspectos. Sin embargo, el propio Antonio Mohamed explicó que iba a ser diferente esta vez y su equipo dio muestras de que está entero para obtener la Recopa Sudamericana, que tendrá revancha el 24 de agosto, en Brasil.
vamos rojo que se puede!!!