La hija de Whitney Houston, Bobbi Kristina Brown, abrió los ojos, el mismo día que iban a desconectarla del respirador, a pedido de su abuela.
Su familia la consideraba muerta y por eso habían decidido sacarle el respirador artificial, pero minutos antes de que eso pasara, ocurrió el milagro y la joven abrió sus ojos.
A Bobbi Kristina le habían diagnosticado muerte cerebral: «Sabemos que está abriendo sus ojos, eso es verdad. Hay algunas cosas más que está haciendo. Krissi está bien ahorita mismo», dijo su hermana a los medios internacionales.
La joven había sido encontrada en la bañadera de su casa sin signos vitales, igual que como había pasado con su madre hace tres años.