Belgrano sigue bajando a los equipos denominados «grandes». La semana pasada fue San Lorenzo y ahora le tocó el turno a Independiente, quien dejó una versión muy preocupante, sobre todo por los errores en defensa, algo que seguramente tendrá que resolver el próximo entrenador, un lugar que espera a Ramón Díaz.
En el primer tiempo, no hubo grandes diferencias. Sin ir más lejos, Independiente tuvo tres claras con Cabrera entrando solo por la derecha, con Iván Pérez y Marco Pérez chocándose entre sí en el área y con el propio Pérez llegando por el segundo palo, en una jugada que no pudo definir.
Por este motivo, los de Avellaneda lo pagaron caro, ya que el local (quien había tenido una con el «Cuqui» Silvera) sí fue preciso y a través de César «Picante» Pereyra se colocó arriba por 1 a 0, a los 37 minutos. De esta manera, se fue al descanso con la ventaja.
En el complemento, Independiente no estuvo ni cerca de inquietar. Además, el visitante entró distraído, ya que en la primera acción (con un minuto de juego), Gabriel Milito se durmió y dejó mano a mano al «Picante» Pereyra, quien no perdonó y puso el 2 a 0. A pesar de que tuvo toda la la etapa para buscar, lo cierto es que los de Avellaneda podrían haber recibido algún tanto más, de no ser por el arquero Assman.
Así, el encuentro no tuvo complicaciones para el local, que abandonó la Promoción y dejó en un mar de dudas al «Rojo».