El ministro de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios, afirmó hoy que «la televisión digital abierta (TDA) es un sistema conceptualmente diferente al cable, ya que promueve la democratización del acceso a los contenidos».
El funcionario agregó que «es además una de las principales herramientas de la ley de medios audiovisuales, que permitió recuperar el éter para que todos los argentinos puedan disfrutar de más de 20 señales de forma gratuita, más allá de su condición social o el lugar donde vive».
De Vido explicó que «la televisión digital se transmite por aire, es decir, a través del éter, lo que implica conceptualmente una enorme diferencia con el cable, que requiere de un vínculo físico pago», por lo que «constituye un error, ya sea por ignorancia o mala fe, calificarla como un cable para todos, ya que es un sistema abierto, libre y gratuito al que todas las personas pueden acceder tan solo con un decodificador».
El ministro salió así al cruce de una información que se publicó hoy en un matutino porteño, en la que se afirma que «el Gobierno destina $2.500 millones para el Cable para Todos».
Asimismo el ministro informó que «la mayor parte de los recursos del programa se destinan al desarrollo de infraestructura, como estaciones transmisoras y antenas», mientras que en «lo único que se invierte es en los decodificadores para los hogares que de otra manera no podrían acceder, lo que representa menos del 20% del programa».
«La potencia y la rapidez con que se instaló el sistema en la Argentina es producto de la clara política de la presidenta de la Nación de democratizar el acceso a los contenidos televisivos», señaló De Vido.
Por su parte, el titular de la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC), Ceferino Namuncurá, remarcó que la implementación del sistema de TV digital forma parte de una»política pública que significa inclusión».
«Resumir la televisión digital a una pelea con un grupo monopólico es hacer una síntesis muy alejada de la realidad», acotó Namuncurá en declaraciones a C5N.
