Cerca de las 15 la ex Presidenta dejó la capital de Santa Cruz, tres días después de los incidentes ocurridos afuera de la residencia de la gobernadora Alicia Kirchner. Escoltada por dos camionetas de su custodia personal, se dirigió por tierra hacia El Calafate. Allí permanecería hasta mañana donde, en principio, podría viajar en avión hacia Buenos Aires.
Desde el sábado por la tarde, Cristina Kirchner permaneció en su residencia de la calle Mascarello 441 en la costanera local, junto a su hija Florencia y su nieta Helena. Transcurrieron doce horas hasta que regresó a su propiedad. El viernes por la noche estuvo en la residencia de su cuñada y mandataria provincial, acompañada de la beba de 18 meses y dos mujeres más que trabajan en la residencia.
La manifestación reclamando por la crisis que vive Santa Cruz, tuvo su momento de mayor tensión cuando un grupo de manifestantes ingresaron a los jardines de la propiedad. Fueron varios minutos de enfrentamiento con la policía provincial, que terminó con tres heridos de balas de gomas y destrozos en la casa. Recién el sábado por la tarde, la ex Mandataria volvió a su chalet.
Sin visitas ni mayor movimiento afuera de su casa de dos plantas, con ladrillos a la vista, Cristina descansó el domingo junto a su familia. Sólo criticó a Mauricio Macri desde la redes sociales y lo acusó de estar atrás de los incidentes vividos en Santa Cruz. Afuera de su casa permaneció un reducido grupo de efectivos federales y dos vehículos de su custodia.
Hoy decidió dirigirse hacia El Calafate, acompañada por su custodia. Sólo dos camionetas escoltaron su vehículo desde la costanera de Río Gallegos hasta retomar una de las avenidas que da acceso a la salida de la ciudad. Mañana podría tomar un vuelo regular de Aerolíneas Argentinas rumbo a Buenos Aires.
Clarín
