Con un doblete de Braian Romero, Argentinos Juniors sorprendió a Rosario Central en el «Gigante de Arroyito» y le ganó por 3 a 1 en un partido disputado por la sexta fecha del torneo de la Superliga. Romero adelantó a la visita a los 35minutos del primer tiempo y luego aumentó a los 36 de la segunda mitad, y estiró Nicolás González, a los 43. El «Canalla» descontó en el tiempo adicionado a través de Fernando Zampedri, y sumó su tercer caída consecutiva.
Rosario Central trató de hacerse el dueño de la pelota a poco de comenzar el encuentro, pero ni Colman ni Gil estuvieron acertados a la hora de conducir el equipo. Argentinos llegó con un plan bien estudiado y puesto en práctica y le sacó provecho al error de Gil, que entregó mal hacia atrás, permitió el contragolpe de Braian Romero, quien tras dejar desairado a Mauricio Martínez, sentenció al «Ruso» Rodríguez.
Central no tenía poder de reacción y por eso Paolo Montero metió dos cambios al inicio del segundo tiempo: sacó a Colman y Santiago Romero para meter al habilidoso Maxi Lovera y Carrizo, respectivamente. Los cambios le dieron a Central el cambio de aire que necesitaba para oxigenar la zona media y a los 9 Carrizo entró por izquierda, remató, y tras el rebote en un defensor el arquero Chaves mandó el balón al córner.
Pese a los buenos intentos de Lovera y de Carrizo, y una clara ocasión que perdió Zampedri cerca del arco, Central tenía el balón pero no lo podía introducir en el arco contrario. Un tiro libre de Maxi Lovera, a los 35, se estrelló en el travesaño, y los hinchas de Central se lamentaron por la poca fortuna. Encima, una pelota larga de Chaves no pudo ser interceptada por la defensa de Central y el balón le quedó a Batallini que desbordó por derecha y el centro le quedó a Romero para sentenciar a un «Ruso» Rodríguez que reaccionó tarde.
El partido parecía estar cerrado, pero Nicolás González se aprovechó del desconcierto local, arrancó en mitad de cancha, eludió a tres jugadores y marcó el tercero. El público local estalló de bronca contra sus jugadores, que solo atinaron a una leve reacción con el gol marcado por Zampedri, cuando ya casi no quedaba tiempo para más.