Antes de la inauguración formal de la cumbre interministerial de la Organización Mundial de Comercio (OMC), sus autoridades dieron un mensaje a los países miembros sobre los «beneficios» del comercio. «Cuanto más abiertos y flexibles seamos, mayores son las posibilidades de éxito», señaló su titular, Roberto Azevedo.
En la conferencia de prensa inaugural que brindó junto a la chair de la MC11 Susana Malcorra, y el vocero de la OMC, Keith Rockwell, Azevedo realizó un repaso por los logros de las cumbres ministeriales anteriores: «Son logros reales, son prácticas para impulsar las economías de los países miembros, y su aplicación es muy importante».
Azevedo remarcó la importancia del contexto en el que se realiza la cumbre, y dijo al respecto que se trata de «un mundo en el que la amenaza del proteccionismo sigue presente». Además, hizo hincapié en la caída de empleo a nivel global y aseguró que «la tecnología es responsable del 80% de los empleos que se han perdido».
Sin embargo, el titular de la OMC pidió «no darles la espalda» al comercio y la tecnología. «Es importante que sigamos mejorando el sistema de comercio para que sea más incluyente», sostuvo al exponer como ejemplo la intervención del organismo en la crisis de 2008. «Tenemos que seguir brindando estabilidad y certidumbre, ese es el mejor mensaje que podemos dar», señaló.
El titular de la OMC pidió además «reconocer la importancia del sistema de comercio internacional para el mundo». En este marco, realizó un repaso por los temas más importantes que se abordarán durante la cumbre, y remarcó que hay «un gran interés» en discutir las agendas de agricultura, pesca, comercio electrónico, género, pymes y servicios e inversiones.
«Hay divergencias grandes sobre estos temas, pero esto ocurre a menudo en las ministeriales. Cuanto más abiertos y flexibles seamos mayores son las posibilidades de éxito», remarcó.
En otro orden de temas, Azevedo también brindó un mensaje a la administración de Donald Trump, luego de las críticas del representante comercial de Estados Unidos, Robert Lighthizer, quien catalogó a la OMC como un sistema de solución de controversias «deficiente» y demasiado interpretativo.
«Sin flexibilidad no se llega a ninguna parte», dijo Azevedo sobre las críticas norteamericanas. «Yo llevo mucho tiempo en esto y debo decirles que hay problemas constantemente que varían con el transcurso del tiempo y los temas», señaló aunque remarcó que evita «señalar a la gente», en alusión a Lighthizer, con quien se deberá cruzarse inevitablemente en el marco de la cumbre.
Respecto a la cobertura de vacantes que la OMC debe cubrir en su Órgano de Apelación, Azevedo señaló que la situación es «de extrema preocupación» porque «se trata de un órgano vital». «Pero lo vamos a superar también, los miembros tendrán que hablar entre sí y resolverlo», sostuvo.
En diciembre debe abrirse una nueva vacante (la tercera) y en septiembre de 2018 una cuarta, lo cual durante el proceso, dejará solo tres miembros en ejercicio para el órgano de Apelación: China, India y Estados Unidos. De esta manera, no incluirá hasta tanto se cubran las vacantes representantes de los países involucrados en los casos que deben resolverse, lo cual complica los dictámenes de dicho órgano.
Azevedo evitó hacer mención a la revocación de credenciales para la cumbre por parte del Gobierno argentino, que incluyó además dos deportaciones, y elogió la organización «a todo nivel».
«El Gobierno argentino ha hecho lo imposible para que la reunión sea un éxito. Desde el punto de vista logístico todo ha sido perfecto», sostuvo.
Cecilia Camarano/Ámbito
