Una forma relativamente nueva de hacer trámites bancarios está ganando lugar a fuerza de una serie de considerables beneficios: ahorro de tiempo, molestias, demoras, nervios y muchas veces dinero.
Las nuevas tecnologías permiten al cliente de banco evitar largas colas y sentirse más seguro, ya que no es necesaria la compra de divisas por ventanilla, ni el depósito en billetes físicos ni la extracción por cajero.
La consultora PriceWaterhouseCoopers (Pwc) reveló ayer que casi el 70% de los clientes bancarios en el mundo utiliza internet para realizar operaciones financieras. Y que un tercio lo hace a través de la banca móvil. Una tendencia que en otros países se encuentra mucho más avanzada, pero que comienza a darse en Argentina.
De hecho, se espera que para el año 2015 la principal interacción de los bancos con sus clientes sea digital.
El estudio sobre banca digital desarrollada («The new digital tipping point»), incluyó el análisis de los especialistas, las perspectivas del sector y los resultados de una encuesta en la que participaron aproximadamente 3.000 clientes bancarios.
Algunos expertos del sector estiman que actualmente en la Argentina sólo un 40% del público acude en persona a la entidad para hacer un depósito. El resto lo hace por home banking (35%) o en forma telefónica (25%). En esto influyó el incentivo que empezaron a implementar muchas entidades, con puntos de tasa de interés adicionales, para la colocación de plazos fijos que se hicieran a través de internet.
