Tras casi una hora de reunión entre el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, y los gremios docentes universitarios, el Gobierno aceptó adelantar la última cuota para el mes próximo que estaba prevista para octubre y abrir la paritaria por encima del 15%, aunque aún no hay certeza de hasta dónde se estiraría en el porcentaje.
«Vamos a comenzar a dialogar racionalmente. Para nosotros la reunión ha sido un avance. A partir del miércoles nos vamos a juntar en forma permanente hasta llegar a un acuerdo, que claramente va a ser superior al 15%», aseguró el funcionario tras el encuentro que mantuvo con las agrupaciones CONADU, CONADU Histórica, FEDUN, CTERA, UDA y FAGDUT.
En ese sentido, las partes resolvieron volver a juntarse el miércoles a media mañana, un día antes de la movilización prevista en el centro porteño que, según los gremios, será la más grande «desde el 2002». Durante el fin de semana, había habido cortocircuitos en las redes sociales entre funcionarios del Gobierno y gremios y figuras de la cultura por el conflicto en torno a la situación en las universidades públicas.
«Estamos absolutamente seguros de que esta negociación se va a terminar resolviendo. Trabajaremos todo lo que tengamos que trabajar. El 15% era una oferta en otro contexto, hoy es poco», agregó Finocchiaro en conferencia de prensa. «No hay ajuste en la universidad pública en el marco del FMI y en ningún otro marco», abundó.
Es que, minutos antes, y si bien se mostraron satisfechas por la perforación del techo del 15% en la negociación salarial del que hasta ahora el Gobierno no se había corrido, las organizaciones universitarias volvieron a machacar con la suba de la inflación y con lo que denuncian desde hace semanas como un ajuste del presupuesto universitario.
«La propuesta nos sigue dejando por debajo de la inflación. Cobrar un 15% en octubre, cuando la inflación proyectada es 24%, es un problema», esgrimieron desde la CONADU Histórica.
En septiembre, el Gobierno adelantará la cuota del 4,2% prevista para octubre,que lleva el aumento pautado hasta ahora al 15%.
«Si no tenemos una solución esta semana, las medidas de fuerza podrían volver la semana entrante», anunciaron desde CTERA en la conferencia, en el Palacio Pizzurno.
Por ahora, algunos gremios seguirán con clases públicas y asambleas, a la espera de la marcha del jueves de la comunidad educativa. Las organizaciones se encargaron de remarcar que la solución aún está lejos.
«Si se abre una negociación, hay que tratar de ahorrar los calificativos. Queremos llegar a un buen puerto, no queremos ser engañados. El poder adquisitivo de los salarios se tiene que mantener. Si el miércoles se avanza en ese sentido, bienvenido sea. Si no, seguiremos reclamando», advirtieron.
«Hay una pérdida muy importante del presupuesto universitario. Hay programas enteros que no se están ejecutando. Hubo una reducción de más de $3.000 millones hace un par de meses. Se han paralizado obras y se ha dificultado el pago a proveedores», insistieron.
Ante esto, Finocchiaro, acompañado por la secretaria de Políticas Universitarias, replicó: «Hay un conflicto salarial que no negamos, pero no hay desfinanciamiento ni ajuste en la universidad pública».