La presidente Cristina Kirchner arribó a las 12:40 a la sede de Coninagro, donde se reunió con los directivos de la entidad agropecuaria que integra la Mesa de Enlace que se enfrentó con el Gobierno en 2008 por las retenciones móviles a las exportaciones granarias.
El almuerzo de la presidente Cristina Kirchner con la cúpula de la Confederación Intercooperativa Agropecuaria (Coninagro) comenzó a las 14:45, dos horas después del arribo de la primera mandataria a la sede de la entidad.
La jefa de Estado mantuvo en un principio una reunión a solas con el titular de Coninagro, Carlos Garetto, a la que luego se sumóla Comisión Directiva en pleno, informaron fuentes de la entidad.
La demora en el inicio del almuerzo se debió a que los directivos de Coninagro mostraron a la presidente una serie de objetos que forman parte de una exposición de artículos regionales.
El ministro de Agricultura, Julián Domínguez, que llegó previamente aseguró que el sector cooperativo del campo es un «aliado estratégico» de la administración nacional y aseguró: «Con los sectores rurales charlamos todo el tiempo».
«Argentina creció mucho y seguirá haciéndolo, y para eso necesitamos la articulación virtuosa e inteligente de todos los actores del sistema productivo», afirmó Domínguez, al ingresar a la sede de Coninagro en la Ciudad de Buenos Aires, ubicada en Lavalle al 300.
Una nueva relación
El titular de la entidad, Carlos Garetto, resaltó el valor de la visita de Cristina Kirchner y dijo que es momento de iniciar una nueva relación entre el sector agropecuario y el gobierno.
«Es la primera vez en la historia de Coninagro que viene un presidente. Después de una situación conflictiva, nos parece que cambió el escenario. Creemos que hay que aprovechar estos espacios donde se pueda construir hacia delante para superar el pasado y resolver los temas que han quedado en la agenda del productor, para alcanzar, por ejemplo, un mayor grado de productividad», señaló Garetto por Radio 10.
Infobae
