El exministro de Economía Domingo Cavallo pronosticó este sábado un futuro muy preocupante al afirmar que “lo máximo a lo que puede aspirar el Gobierno de Alberto Fernández es a que la inflación no supere el 80%”.
En este sentido, advirtió de que el escenario en la Argentina podría ser “muchísimo peor” si la Casa Rosada accede al reclamo kirchnerista de sacar a Martín Guzmán del Palacio de Hacienda por pedido de la vicepresidenta Cristina Kirchner.
En una publicación en su sitio web titulada “Que la inflación anual no supere el 80% es lo máximo a lo que puede aspirar este gobierno”, Cavallo afirmó que “a pesar de la continuidad de la reactivación económica pospandemia, hasta 2024 la suerte económica está echada. La economía no va a mejorar, pero sí puede empeorar. Y mucho”.
A su vez, el funcionario del menemismo y la Alianza remarcó que el Gobierno, a pesar de cualquier esfuerzo, no podrá cumplir con el acuerdo con el FMI. Esto incluye a las proyecciones de inflación con los que se elaboró el programa, y también a la meta de acumulación de reservas.
Sin embargo, el “padre de la convertibilidad” aseguró que en sus revisiones trimestrales el Fondo Monetario otorgará los “waivers” (perdones) necesarios para que se realicen los desembolsos que permitan hacer los pagos comprometidos en el préstamo de 45 mil millones de dólares que la entidad con sede en Washington otorgó durante el gobierno de Mauricio Macri. “El FMI procurará evitar que Argentina caiga en “arreas” (atrasos) con la institución”, explicó el exministro.
Frente a ese contexto, Cavallo señaló que para conseguir ese gesto del FMI, el Gobierno “tendrá que aumentar muy pronto el ritmo de devaluación en el mercado oficial (que deberá ubicarse entre el 4 y el 5% mensual). Y también tendrá que elevar la tasa de intervención del Banco Central (y la tasa que estará dispuesto a pagar el Tesoro para colocar deuda interna) a no menos de 4,7% mensual, es decir 56% nominal anual o 73% efectiva anual”.
En esta misma línea, el extitular del Palacio de Hacienda agregó: “También tendrá que producir un fuerte aumento de las tarifas eléctricas, del gas y los transportes, como para producir una reducción de los subsidios económicos del 0,8% del PBI con respecto a lo gastado en 2021. Alternativamente, tendrá que reducir el gasto de capital o algún otro rubro del presupuesto, hasta completar esa reducción como porcentaje del gasto primario”.
Es por todo esto que, según su ejercicio de simulación que detalló en una serie de gráficos con los que ilustró su análisis, Cavallo argumentó que la inflación va a ubicarse “alrededor del 72% anual durante 2022. Aunque bien podría llegar al 80% si se prolongan los desvíos con respecto a mi previsión que ya se observan en el mes de abril”.
Fuente: tn