Rusia «ha incumplido sus compromisos» con las Naciones Unidas (ONU) y «ha traicionado» la Convención sobre Armas Químicas al «proteger incondicionalmente» a Al Assad, aseguró la portavoz del Departamento de Estado, Heather Nauert, en un comunicado.
Al menos 40 personas, la mayoría mujeres y niños, murieron el sábado debido a un ataque químico
en Duma, según la ONG Cascos Blancos, dedicada al rescate de víctimas en zonas bajo el control de la oposición.
El gobierno sirio y Rusia negaron tajantemente el uso de armas químicas y atribuyeron la denuncia a «una serie de países occidentales» que intentan impedir la reanudación de la expulsión de rebeldes de Duma, estancada desde hace un par de días.
«La protección del régimen de al Assad por parte de Rusia y su incapacidad para detener el uso de
armas químicas en Siria cuestiona su compromiso de resolver la crisis global y las mayores
prioridades de no proliferación», armó
la vocera de la diplomacia estadounidense.
«Rusia, con su inquebrantable apoyo al régimen, en última instancia es responsable de estos
brutales ataques, dirigidos contra innumerables civiles y la asxia de las comunidades más
vulnerables de Siria con armas químicas», agregó.
El gobierno de Donald Trump sigue de cerca las informaciones sobre el presunto ataque a un hospital en Duma, donde, sin concretar la cifra de muertos, reconoció que puede haber «un número potencialmente alto de víctimas».
«Si se conrman estos informes espeluznantes, exigen una respuesta inmediata de la comunidad internacional», aseguró la vocera.
Fuente: Telam