Racing sumó un punto que lo deja en la cima, aunque posiblemente la pierda, ya que son varios los equipos que tienen posibilidades de pasarlo. Sin embargo, el encuentro se dio de tal manera, que el empate frente a Arsenal fue un premio, tomando en cuenta que perdió a dos jugadores y fue superado en algunos tramos del complemento por el rival.
En el primer tiempo, los dos amagaron con hacer un partido entretenido y de ida y vuelta. Sin embargo, esto fue solo durante los primeros 15 o 20 minutos, por lo que el juego decayó de manera notable, al punto que los últimos 25 minutos fueron con Racing buscando sin claridad y con Arsenal siendo un escollo por demás complicado, producto de su férrea marca. En cuanto al gol anulado a Teófilo Gutiérrez, el colombiano estaba adelantado claramente.
El juego era parejo en la segunda parte, pero Racing siempre marcaba el ritmo. Sin embargo, la expulsión de Teo Gutiérrez cambió todo, porque el local perdió a su goleador – que igual no iba a estar la fecha siguiente por irse con su selección – y el visitante vio la posibilidad de ir a buscar, por lo que empezó a inclinar la balanza. Previamente, al local le anularon un gol nuevamente, pero Lucas Castro parecía – fue muy fina la jugada – estar habilitado.
Desde ese momento, el dominio pasó a ser de a ratos para cada uno, por lo que la victoria estaba para cualquiera. Sin embargo, la misma no llegó para ninguno, porque Arsenal bajó su intensidad sobre el final, tras sufrir la expulsión de Jorge Ortiz, mientras que “La Academia” terminó por conformarse con el empate, cuando se quedó con nueve por la roja a Valentín Viola. Por este motivo, el juego terminó con más faltas que fútbol y un 0 a 0 más que justo.
La figura, o lo mejor de un partido pobre, fue Gabriel Hauche. El motivo para haber sobresalido del resto, es que se las ingenió solo durante la segunda parte para intentar incomodar, lo que a veces logró, a una dura defensa como la de Arsenal, que se llevó un valioso punto de Avellaneda.
