Este domingo la comunidad católica del barrio Quilmes de la ciudad de La Banda celebró a su Patrona Nuestra Señora de La Salette. En la oportunidad el obispo diocesano Vicente Bokalic exhortó a los fieles, «dejémonos reconciliar con Dios, para ser misioneros del perdón de Dios, para llevar esperanza, alegría a los hogares».
A pesar de la pandemia, que todavía atraviesa el país, los salettenses organizaron una serie de actividades para celebrar los 175 años de la aparición de la Madre de Jesús en la montaña de La Salette (Francia).
Las actividades culminaron este domingo, con una caravana que realizó durante la mañana. En la oportunidad, la imagen de la Virgen de La Salette recorrió las calles de la ciudad acompañada por el Santísimo Sacramento.
Por la tarde, monseñor Vicente Bokalic visitó la parroquia y presidió la Santa Misa. El pastor de la iglesia santiagueña en su homilía indicó, «uno podría preguntarse por qué queremos tanto a la virgen; y la respuesta es que Jesús nos la regala y por eso la queremos tanto. La consideramos madre y está al lado nuestro, particularmente en las horas difíciles de nuestras vidas».
Más adelante agregó, «seguramente muchos de nosotros hemos experimentado esto que Jesús no regaló que es la presencia de la Madre. Necesitamos gestos, María estuvo al pie de la cruz, cuando su hijo estaba dando la vida. María acompañó a Jesús toda su vida como discípula. Ella escuchaba a su hijo«.
Por otra parte monseñor al reflexionar sobre las lecturas leídas, en la celebración, hizo hincapié en la palabra Reconciliación, «esto significa unir lo que estaba separado».
«El apóstol Pablo nos dice dejensen reconciliar con Dios. Este Dios tomó la iniciativa de reconciliación con nosotros, que nos creemos semi dioses y así nos va cuando nos despegamos de Dios. Andamos a los tumbos no es que vivamos mejor, no es que seamos más felices. Estamos cada vez peor; cuando cortamos los lazos con Dios comienzan los males«, sostuvo.
Bokalic no dudó en afirmar, «sabemos cuál es el camino, pero somos débiles y elegimos el otro camino que es el mal, el pecado. Dios, que es ofendido, toma la iniciativa y sale al encuentro nuestro enviando a Jesús, su hijo, para reconciliarnos«.
El prelado santiagueño en este punto ahondó, «Jesús nos conoce, sabe todo lo nuestro, no le podemos mentir. El mensaje de La Salette es trabajar por la reconciliación«.
También especificó, «estamos peleados como sociedad, estamos divididos, estamos disgregados; hay algunos que trabajan para esto, para que nos dividamos más«.
«Estamos divididos en nuestras casas, que difícil es la convivencia en nuestras casas, cuesta mantener la paz; que difícil es encontrar el momento para dialogar, todo lo queremos arreglar a los golpes. Ese no es el camino«, subrayó.
Para finalizar su mensaje, Bokalic instó a los fieles a pedir a la Virgen de La Salette la gracia de la reconciliación.
Por último se debe mencionar que un grupo de vecinos, pertenecientes a la comunidad de La Salette, se consagraron a la Virgen María. Este fue un momento muy emotivo.
