El conductor de Soñando por Bailar, Mariano Iúdica, que el pasado lunes despidió el programa hasta enero de 2013, cuando llegue la gran final, habló sobre el éxito del ciclo y la importancia de Marcelo Tinelli, su mentor.
«Estoy muy movilizado. El trabajo de cabeza lo hice la noche anterior al final, y anoche solo quise disfrutar, como las grandes noches y las grandes puestas que hicimos en el ciclo», sostuvo en Un dia divino, en Radio Brisas de Mar del Plata.
En cuanto al fenómeno televisivo del Soñando, Iúdica subrayó: «Fue maravilloso porque vinimos por cinco programas y nos quedamos hasta ahora. Logramos un programa diferente en cuanto a contenido y lenguaje».
El conductor reconoció que a pesar de la dura competencia, al ciclo le fue muy bien: «Graduados es el tanque del año, es un tren. Cuando terminaba, como nuestro programa es bastante zappinero, la gente se sumaba a vernos. La misión era entregarle un buen piso a Marcelo y se cumplió hasta el último día».
En este sentido, Iúdica resaltó la figura del conductor de ShowMatch: «Marcelo Tinelli fue ‘el golpe de timón’ del Soñando. Al segundo programa dijo que quería gente talentosa, y a emocionar. Marcelo me dijo ‘sos un tipo emotivo’, y del día a la noche me cantaron 32 puntos en el prime time de canal 13».
«Tener a Tinelli a toda hora es un gran changüi para mí. Estoy atento a cada cosa que dice, sabe un huevo de la industria y de lo que es un programa en vivo. Cuando vamos de conductor a conductor, yo tengo un estilo y lo defiendo. Las marcaciones se las hace a Mariano, no a alguien que quiere que sea como Tinelli. Me ha marcado cosas asombrosas», reconoció.
Por último, Iúdica bromeó sobre el vértigo de la televisión, las corridas del rating que hicieron que su programa arrancara como un «tapa bache» y se terminara instalando en El Trece: «Me voy de viaje con el teléfono prendido. Capaz que tenemos que volver la semana que viene, nunca se sabe, vinimos por cinco programas y mirá lo que pasó».
