Más allá de sus debilidades futbolísticas, Gimnasia y Banfield brindaron un espectáculo atractivo, porque empujados por sus necesidades protagonizaron un partido de ida y vuelta, con emociones en los dos arcos.
Los primeros diez minutos del juego fueron decidamente para Banfield, que se hizo fuerte en la mitad de la cancha y generó tres acciones claras de peligro frente a los dominios de Monetti.
Así, Banfield lo tuvo con un remate del uruguayo De Souza, con una aparición por sorpresa por derecha de Toledo y con un cabezazo de Ferreyra.
Pero de a poco, Gimnasia fue tomándole el pulso al encuentro y reaccionó favorablemente, acompañando con sus volantes a los movimientos de Claudio Graf (figura del encuentro) y Guillermo Barros Schelotto.
El local avisó con un cabezazo de Alejandro Capurro y con un tiro de libre de Fontanello, buscando equilibrio y profundidad a partir del esquema de 4-4-2 que lleva adelante el técnico Darío Ortíz.
Pero Banfield también estaba a la expectativa y encendió la alarma con un desborde de Ferreyra por izquierda y un posterior remate de Gómez que no llevó consecuencias para el arco defendido por Monetti.
Hasta que a los 37 minutos, Barros Schelotto le puso una pelota exacta a Claudio Graf quien se fue solito a definir con un toque de zurda ante la salida de Bologna, para establecer el 1 a 0 que tranquiló al local.
En el complemento, Banfield, que muestra signos de confusión futbolísticas, intentó ser más ambicioso, con la presencia de Achucarro en la cancha, pero únicamente generó peligro con los pelotazos cruzados para Ferreyra.
En cambio, Gimnasia definió el pleito en el contraataque, porque a los 10 minutos, Graf desbordó por la derecha y le sirvió el gol a Alejandro Capurro que empujó el balón de cabeza abajo del arco.
Con este resultado, el Lobo sueña con permanecer en Primera, volvió a ganar después de siete partidos y su ilusión pasa por escaparle al descenso directo para acceder a jugar (como en los años anteriores) una de las promociones.
Fuente: Telam
