Olímpico se quedó con un nuevo triunfo en la Liga y sigue con su enorme racha ganadora. El equipo de Fernando Duró venció a Boca por un claro 73-54, en otra gran exhibición colectiva con varios puntos altos y en una victoria que se transforma en la 11° de forma consecutiva para Olímpico. Diego Guaita brilló con 24 puntos y un exquisito 6/6 en triples, secundado por un fenomenal Maximiliano Stanic (16 unidades y 6 asistencias).
El elenco santiagueño comenzó demostrando toda su intensidad, con buena apertura desde los pases para crear espacios y lanzar cómodo. A pesar de arrancar 4-0, el Negro bandeño no tardó en tener algunos problemas ante una defensa de Boca que luchó y emparejó el partido. El Xeneize, con un parcial de 6 a 0 y la marca registrada de Boccia, encontró la forma de dañar.
Así transitaron los primeros diez minutos, con esa notoria paridad y con ambos sin poder sacarse ventajas. Ramírez Barrios y Freeman fueron las otras dos armas más efectivas del Xeneize, en tanto que la constancia de McCullough y el buen ingreso de Guaita trataron de impulsar a Olímpico.
De todas formas, dentro del parejísimo trámite, la propuesta de Boca terminó dando mayores resultados porque logró sacar del ritmo intenso y dinámico a Olímpico. Claro que cada mínima falla de la visita fue facturada por los santiagueños, también con algunas virtudes defensivas del local (como las dos tapas de Williams, primero a Hernández y luego a Boccia) por esa razón los de Duró se mantuvieron al filo del score y cerraron el primer capítulo igualados en 15.
El arranque del segundo parcial fue más dinámico, sin tanto dominio defensivo y con una mayor preponderancia en el ataque. Stanic comenzó a ser cada vez más decisivo en el juego de Olímpico, junto con el caudal obrero de Guaita (terrible en el tiro a distancia y con rebotes importantes) y un Olímpico que empezó a potenciarse dentro de un trámite más favorable a su estilo.
Además los bandeños ganaron una mayor intensidad gracias a los intensos de Cosolito y Crotti, no solo con puntos en la mano porque también lograron mantener ese ritmo vertiginoso. Con eso sacaron una diferencia sobre su rival.
Boca también tuvo su momento aunque con el correr de los minutos se fue pinchando, por cierta incomodidad y por algunos desbalances defensivos. Sin poder mantener una línea defensiva apta los capitalinos sufrieron mucho para frenar a la dupla Stanic-Guaita, no tuvieron demasiado éxito en su cometido pero lograron mantenerse al filo.
Un buen y fugaz pasaje de Atkins ayudó para no perder el hilo, el tridente Boccia-Freeman-Ramírez Barrios batalló pero de todas formas Olímpico sacó ventajas en el ocaso del parcial. Boca se fue descolocando en el cierre y el dueño de casa terminó haciendo un mejor negocio: 39-32 al descanso largo.
Gran parte de la diferencia que sacó el Negro fue debido a las buenas soluciones que consiguió desde sus suplentes. Es cierto que tuvo un terrible Guaita como abanderado (14 puntos, con 4/4 en triples), pero también una diferencia bestial desde el banco: 25 puntos desde los relevos de Olímpico contra 5 puntos desde los suplentes de Boca.
Olímpico mantuvo su brecha de distancia en el tercer episodio y por momentos la amplió. Ayudado por un Boca que cometió malas decisiones en ofensiva, el equipo de Duró llegó a sacar trece tantos de diferencia gracias a un nuevo triple de Guaita y un doble de McCollough (49-36).
No obstante, gran parte de esa levantada e incremento de la brecha de Olímpico se dio en base al enorme trabajo de Williams en defensa. El extranjero secó las ofensivas capitalinas, que no solamente estuvieron erráticas sino que también se encontraron con la gran oposición del foráneo.
Boca amenazó con cambiar el curso del encuentro con un parcial de 7 a 0, de la mano de Ferreyra, Gargallo y una muy buena entrada del pibe Vallejos (triple). Ramírez Barrios y Freeman también tuvieron su pequeño apartado en el cierre del periodo, pero Olímpico volvió a sacar distancias con una nueva aparición del intratable Guaita: 58-46 al concluir el tercer periodo.
El desgaste que Olímpico ya venía generando, fuese con su intensidad, su efectivo recambio en la banca o el evolutivo balance en defensa-ataque, terminó por dar resultados en la apertura del último capítulo. El Negro bandeño se apoyó en una racha mortífera de Stanic, y ayudado por Van Lacke y Guaita sacó una abultada brecha de veinte tantos: 71-51 a menos de seis minutos.
Olímpico quebró definitivamente el partido en esos cuatro minutos del periodo final, Boca no tuvo respuestas y a pesar de algunos intentos se terminó quedando sin nafta. Los de Duró le cerraron el aro al Xeneize y sobre los últimos minutos se dedicaron a sostener esa ventaja.
Restando poco minutos para el cierre, Capelli vislumbró la imposibilidad de revertir el marcador y envió a la cancha a los más pibes del plantel. Boca tuvo una fuerte entrega hasta el final, pero no pudo hacer nada para frenar a un Olímpico que sigue inspirado, que ganó por 73-54 y no para de sumar en la Liga.
Fuente: basquet plus