En un emotivo encuentro, cantantes católicos de distintas parroquias de la Diócesis de Santiago del Estero se unieron para grabar el vídeo clip del Himno a Mama Antula. Se trata de una zamba escrita por Juan Carlos Carabajal, en el 2016, para homenajear a la Beata.
Bajo la dirección del Obispo Auxiliar de Santiago del Estero, Enrique Martínez Ossola, y el padre Alejandro García, se desarrolló el proyecto ideado por el productor Rubén Gurnier, cuyo objetivo fue llevar un canto de esperanza al corazón de la familia.
Al respecto Gurnier manifestó, «la canción, que fusiona el orgullo santiagueño y el amor de Mama Antula hacia el pueblo, busca transmitir sus actitudes cristianas heroicas y su compromiso en llevar el evangelio a todos los rincones. En tiempos difíciles, la melodía invita a trascender las fronteras del egoísmo y la división, permitiendo que el amor de Jesús ilumine los corazones argentinos».
A su turno monseñor Martínez Ossola destacó: «la noticia de contar con la primera santa argentina se convierte en un llamado a la esperanza y solidaridad. Este himno hecho canción pretende ser una expresión viva de la iglesia en esta patria, siendo portavoces del amor divino que Mama Antula tanto predicaba. Con el mensaje de «Ser y hacer amigos para Jesús», se busca continuar la misión de Mama Antula contagiando el amor a través del servicio».
En la edición y masterización del tema trabajaron Gustavo Luna Herrera y el salteño Alejandro Figueroa conocido por trabajar con artistas como Los Nocheros y Ahyre.
La dirección del proyecto audiovisual es responsabilidad de Martín González, Exequiel Tarchini y Jorge Suaid.
El vídeo clip se grabó en la centenaria Capilla del Colegio Belén.
El tema fue interpretado por Virginia Fernández, Luciana Gutiérrez, Rubén Gurnier, José Juárez, Leo Juárez y el párroco Alejandro García.
Todos los integrantes del proyecto expresaron sus ganas de cantarle el himno a Mama Antula, a su santidad el Papa Francisco, quien manifestó su cariño especial a la provincia de Santiago del Estero que celebra esta gran fiesta del pueblo de Dios.
Para el final coincidieron en que «esta oración cantada perdure en el tiempo como un símbolo de fe, gratitud y devoción del pueblo santiagueño hacia nuestra Mama Antula».
