La mediación es una tendencia mundial, motivo por el que el Poder Judicial de Santiago del Estero está trabajando firmemente en aplicarla de manera intensiva en todas sus Circunscripciones.
Para referirse a esta trascendente temática, dialogamos con el Dr. Antonio Tula, especialista en la materia, durante su paso por esta ciudad, instancia en la que expuso en el Poder Judicial ante magistrados, funcionarios, empleados judiciales y mediadores.
¿Cuál es su visión sobre el trabajo que viene desarrollándose en mediación en la provincia?
Me sorprendió mucho la infraestructura porque es muy atinada. Son muy cómodas las salas de audiencias, que están perfectamente amuebladas y equipadas. Realmente es muy agradable para el objetivo que tiene esas reuniones, tan distinto a las formalidades jurídicas. También me sorprendió el grupo de alumnas por su entusiasmo porque vi muchas ganas de aprender, quizás también la formación desde otro perfil de formadores que forman en relaciones un poco mas estructuradas y yo tengo una mirada más flexible.
¿Cuál es su mirada de la mediación hoy y cuál es la tendencia?
La mediación parte de la capacidad de las personas involucradas en el conflicto para encontrar canales de solución desde su propia iniciativa. No se cosifica el relato de las partes del conflicto para llevar a una cosa juzgada, sino que son las partes las que trabajan, desde sus propias capacidades para alcanzar soluciones. La función del mediador es generar un giro a la emoción y al enojo para que puedan descubrir nuevas formas de mirar las cosas. La mediación en si es un instrumento de pacificación.
¿Cuál es el perfil que debe tener el mediador y cuáles son las herramientas factibles con las que cuenta para llegar al éxito de la mediación?
El potencial es un gran respeto al ser humano, ponerse en el lugar del otro, es una vocación de servicio. Es necesario que el mediador no se vea como un abogado. En Chile, los mediadores del sistema son abogados, maestros, médicos, ingenieros y han hecho una interdisciplina de la mediación. Nosotros tenemos una mirada cerrada donde se piensa que los mediadores sólo pueden ser abogados
Las herramientas son muchas provienen del campo sistémico, son muchas y potentes, también se requieren capacitadores que se ubiquen en términos de actos que puedan ser puestas en acción con flexibilidad.
Desde su experiencia laboral en zonas vulnerables, ¿de qué manera se ha llevado adelante ese proyecto?
En Mendoza comencé a trabajar desde el llano en un pueblo de 4.000 habitantes, en coordinación con el hospital y el juez de Paz y otras instituciones, logramos crear un espacio de resoluciones de conflictos muy interesante. Allí logré más de 2.000 mediaciones, con una experiencia tan enriquecedora que la incorpore a mi producción doctrinaria y en mi enseñanza.
¿Cómo ve la comunidad el concepto de la mediación, en el país y en Santiago del Estero?
Hay que crear una sensibilización fuerte porque el paradigma social es si yo me enojo con vos te arreglas con mi abogado, por lo que hay que salir de ese formato que todo va a Tribunales.
Esto hay que explicarlo a la comunidad a través de publicidad explicándolo en términos sencillos, para que las personas puedan entender lo que es la mediación. Todavía en el país no se encuentra el sistema idóneo de publicidad para que la población pueda realmente empaparse de esta maravilla.
¿Qué otros recursos se podrían aplicar para el conocimiento de la mediación?
La difusión y la formación de los mediadores a través de instituciones que no presente a la mediación como formato burocrático sino con flexibilidad. Y luego, una ley que establezca una instancia previa obligatoria antes de presentar una demanda, para que las partes tengan que escuchar con calidad cual es la perspectiva y la posibilidad de solución, y decidir si van a la justicia. En mi experiencia, en la provincia de Buenos Aires, en las audiencias previas logre resolver el 80% de los casos que pude intervenir en el proceso de mediación.
¿Desde su experiencia y conocimiento, cuál es el denominador común que percibió en la mediación?
He mediado en diferentes lugares y en todos lados hay un denominador común, que es ver a personas lastimadas, heridas, ofendidas, que pueden encontrar un espacio donde resolver sus conflictos en otro tono de voz, con otra inteligencia emocional y terminar en una pasificación de los vínculos. Mi anhelo es que puedan profundizar en la proyección que tiene el sistema y que no quede banalizado como una herramienta que simplemente se pone para bajar la litigiosidad.
¿Cuáles son las ventajas a priori de la mediación?
El éxito está en sacar de la estadística judicial conflictos que los abogados llevan a la instancia judicial, cuando no sean conflictos que requieran la intervención de la Justicia. En EE.UU. se ha alcanzado un nivel muy alto de resolución de conflictos en mediación, y es a lo que se debe aspirar en nuestro país.
