Marcela Tinayre fue una de las invitadas al último almuerzo del año de Mirtha Legrand y le dedicó unas cariñosas palabras a su madre, en mitad de la comida. Le dijo que era un ejemplo para las mujeres y que la quería.
«Estoy acostumbrada a ser hija de mi madre, de una mujer tan talentosa, pero nunca desde que este ciclo que es sábados y domingos, tanta gente joven y hombres se me acercan y dicen ‘genia, ídola tu madre'», contó sonriente Marcela, que definió el cambio de horario de su madre como una «pegada, como nunca».
Luego, llegó la parte emotiva del almuerzo: «Como hija me siento tan orgullosa, feliz de verte a tu edad, siendo una mujer tan trabajadora, sos un ejemplo para todas las mujeres mamá, te quiero tanto».
Casi entre lágrimas, Mirtha le recordó: «Nunca me decís eso. Cada tanto hay que decirle a la gente ‘te quiero mucho'». «Pero hoy tenía ganas, porque es un orgullo», respondió marcela.
Más tarde, la diva le pidió que cuente qué recordaba o extrañaba de su padre Daniel Tinayre, porque «ellos eran compinches, me dejaban solos, se llevaban bien, les gustaba ir a comer»: «Me entendía todo, extraño el abrazo paternal único, no hay hombre en la vida que te abrace así, me da pena pero la vida quiso que sea así. Nacho y Juana eran la luz de sus ojos y era un tipo rudo., Me hubiese gustado que se quede un poco más».
Cambiando el tono de la conversación, Marcela también contó que Chiche Gelblung la invitó a hacer un programa de televisión: «Me propuso hacer un noticiero, él siempre me proponía hacer programas con él, pero en ese momento mamá estaba peleada con él. Es probable que vayamos en un noticiero de siete de la mañana, pero le dije que no me iba a levantar a las cinco de la mañana».
