Es una de las más frescas de los de , acostumbrada a decir lo suyo con firmeza. Pero si en la pantalla de TN (“Primera tarde” y “Tiene la palabra”) se la ve aguerrida, en la vida privada, es mucho peor. Se define como calentona, fierrera y temperamental. “Escupí a más de un hombre”, se anima a decir la Lorena Maciel.
Al hablar de su carácter, que una vez tiró todo lo que había en un mostrador y que ante el llanto de su hija le prometió que no iba a volver a hacerlo. “Puteo mucho cuando me enojo”, abunda.
Con 38 años, y de pareja con el también periodista Gerardo Young (al que conoció cubriendo el recordado motín de Chica y con el que tuvo su primera cita en una morgue), reconoce a la revista que siembre le gustaron “los laburantes” y que le “dan lástima las dependientes”.
“Si un tachero me tira el auto encima, soy de bajarme para patearle la puerta. Soy calentona, es así”, se define Maciel.
Más allá de su temperamento, la periodista sostiene que es insegura. “Siempre me faltan cinco para el , nunca fui la mejor ni la más linda, perdí la beca del colegio por quince centésimos. Yo nací para columnista”.
Madre en tres oportunidades, Maciel conserva una figura privilegiada y, para desilusión de la platea masculina, afirma: “Los hombres, que son medios nabos, creen que tengo mucho busto”.
