El líder de la barrabrava de Boca, Rafael Di Zeo, fue autorizado por la Justicia para salir de la Argentina y viajar a Madrid, donde el Xeneize enfrentará a River el próximo domingo en la final de la Copa Libertadores.
Fuentes del Ministerio de Seguridad le confirmaron a Toda Pasión que el líder de La 12 tiene prohibido el ingreso a la final ya que está en el listado de barras con derecho de admisión en la Argentina.
La última aparición pública de Di Zeo fue hace pocas horas en el banderazo que los hinchas le dedicaron a los jugadores camino al aeropuerto de Ezeiza.
Según publica Infobae, la autorización para viajar fue otorgada por Sabrina Namer, presidenta del Tribunal Oral Federal 8. En esa misma fiscalía hay una causa en la que se lo acusa a Di Zeo de encubrir a otro barra con pedido de detención.
Para Namer no hay posibilidad alguna de que el líder de La 12 se fugue o entorpezca la causa judicial. Además Di Zeo ya viajó en otras oportunidades y siempre regresó a la Argentina.
Toda Pasión confirmó que Di Zeo no podrá ingresar al Santiago Bernabeú. Lo mismo le sucedió en Brasil cuando hace pocas semanas Boca se enfrentó al Cruzeiro por la Copa Libertadores.
Boca ya está en Madrid
El plantel arribó este miércoles a España para prepararse para la final. Los jugadores junto al cuerpo técnico y dirigentes salieron de Buenos Aires en la madrugada de hoy y arribaron a la capital en horas de la tarde.
El primero en aparecer en el hall del aeropuerto de la capital madrileña fue Guillermo Barros Schelotto, y detrás todo el plantel boquense, con pantalones color gris y camperas azules.
Boca se instaló en el hotel Eurostars Suites Mirasierra, para descansar y a partir de mañana se entrenará en el predio de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Con una temperatura que ronda los 10 grados, el plantel llegó al hotel y una gran cantidad de hinchas lo estaba esperando.
El vuelo del plantel tuvo mate, cumbia y hasta juego de cartas, algo que los propios jugadores mostraron a través de las redes sociales, durante las 12 horas que duró hasta tocar suelo español.
El plantel auriazul fue despedido por una multitud, que acompañó al micro hasta el aeropuerto de Ezeiza, y en cercanías del Parque Lezama hubo fuegos artificiales para coronar la noche antes de la partida.
