Rusia y Ucrania: Un conflicto con historia

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Por Emilio J. Sialle, analista en Comercio Internacional

Tanto Rusia como Ucrania tienen su origen en el Estado Eslavo oriental Kievan Rus, que significa “un solo pueblo” (edad media). Con el pasar de los años cada país forjo su idioma y cultura diferente. Mientras el imperio ruso iba tomando forma y anexando provincias, Ucrania iba lentamente logrando una identidad definida. Tanto Rusia como Ucrania formaron parte de este imperio que vio su ocaso en 1917 con la revolución rusa. Ucrania por fin lograba su anhelada independencia, pero esta solo duraría 3 años.

La unión soviética daba un paso adelante y dicho país volvería a ser una provincia del ahora estado Bolchevique. Pasaron décadas y en el 1991 se disuelve la Unión Soviética, pasando Ucrania a formar uno de los 15 nuevos estados independientes.

El Este agrario de Ucrania siempre disconforme con el Oeste dominante de Kiev, marco tensiones en un país que intentaba formarse y organizarse tanto en el plano nacional como internacional. Rusia no ajena a esta situación, siempre estuvo atenta a los acontecimientos de su país fronterizo vecino.

Crimea, la gran obsesión rusa 

Crimea (zona que perteneció a Ucrania hasta el 2014) es la llave principal de Rusia en la actualidad. Esto le permite a Rusia generar un mayor control en los negocios de la zona, y al mismo tiempo fomentar un pasillo de energía de abastecimiento de gas a sus países vecinos Europeos.

Esta región gobernada por políticos pro rusos, pasó a ser anexada a Rusia en el 2014 de forma pacífica. Pero, ceder esta región, significó, un antes y después para Ucrania; las tensiones estaban a flor de piel y la guerra civil estallo de forma desencadenada.

Las ciudades de Donetsk y Lugansk, son gobiernos históricamente Pro rusos, vieron lo sucedido en Crimea y anhelaron el mismo destino, la independencia. Esto genero que Kiev responda de manera contundente y beligerante en contra de los separatistas.

14.000 muertos, 1 año de guerra y la destrucción de las dos zonas implicadas, es el saldo de este conflicto. En el 2015, y con esfuerzo de la ONU se logro firmar el cese del fuego mediante el pacto de Minsk. Finalmente, Ucrania culpo a Rusia de ayudar militarmente a los separatistas Pro rusos en el conflicto y pidió sanciones comerciales y diplomáticas.

Crisis actual 

En diciembre de 2021 las fuerzas rusas se desplegaron a lo largo de la frontera de Ucrania. Zelensky, su Presidente, dijo que esto representaba una amenaza directa, y además afirmó que los rusos, construyeron líneas de suministros, unidades médicas permanentes y descargas de combustible que podrían sostener en el tiempo, un conflicto si Moscú decide invadir.

Al día de hoy, Rusia reconoció como estados independientes a Donetsk y Lugansk. Esto para Ucrania, solo significo una cosa: invasión Rusa y violación a su soberanía.

Cien mil soldados rusos han permanecido reunidos en la frontera con Ucrania, a pesar de las advertencias del presidente de EE.UU. Joe Biden y de los líderes Europeos, sobre las graves consecuencias que se podrían gestar si Putin sigue adelante con una invasión.

El Kremlin, aún hoy, niega estar planeando un ataque y argumentó que el apoyo de la OTAN a Ucrania incluye: el aumento de los suministros de armas y el entrenamiento militar. Constituyendo así, una amenaza creciente en el flanco Occidental de Rusia.

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