Julián Weich, se refirió a los insultos que recibió tras compartir la mesa de Mirtha Legrand con Elisa Carrió y expresó que «salí asustado del programa» cuando vio el Twitter.
«¿Qué habré dicho que no me di cuenta? fue lo primero que pensé. Hice preguntas de sentido común: ‘Lilita, si sos presidente, ¿Qué harías?’, ‘¿Quiénes son los políticos buenos?’. Son preguntas de un nene de ocho años, no de alguien que está operando políticamente. Sin embargo, la gente leyó lo que quiso leer», manifestó el conductor de «Mi mamá cocina mejor que la tuya» en diálogo con La Once Diez/Radio de la Ciudad.
Luego afirmó que «el fanatismo político no sirve para nada» y que genera el efecto opuesto: «A mí el fundamentalista no me va a convencer de algo, es más, me va a hacer alejar de cualquier fanatismo, de lo que sea. Es como los veganos, que te insultan, te dicen «vos comés carne, asesino». No te va a hacer vegano eso, al revés, te va a hacer anti-vegano».
Por otro lado, sostuvo que le costó «la bronca de muchos periodistas» que no hable de su vida privada y cuestionó las guardias periodísticas: «A mí no me interesa que me esperen a la salida de un restaurante con una cámara prendida para hablar de no sé qué. Yo doy un montón de notas, pero eso me da bronca. Yo no puedo ser empleado de uno que se le ocurre ponerme una cámara en la puerta de no sé dónde».
Asimismo, el conductor reiteró sus críticas al «minuto a minuto». Si bien dijo que «es importantísimo para ver qué de tu programa sube la audiencia y qué la baja», cuestionó que se lo use en tiempo real: «Yo estoy en contra del minuto a minuto. Para mí es terrible para la televisión. Hay una voracidad para hacer rating y se desprestigia la televisión. Todos están con la obsesión de ganar y no con la obsesión de hacer una mejor televisión».
«Hasta en los noticieros pasa, cuando una noticia la estiran o la repiten. Te dicen ‘repetimos: mataron a 16 personas’. Lo repiten porque alguien le dice ‘está subiendo el rating’. Pero va en desmedro del producto», concluyó.
Ratingcero
