«Mi prioridad como ministro de Asuntos Exteriores es garantizar la seguridad y protección del pueblo danés en un mundo donde la democracia, los derechos humanos y nuestros valores se ven sometidos a una presión cada vez mayor», expresó el ministro de Relaciones Exteriores.
A raíz de la escalada de violencia con la llegada del régimen talibán al gobierno de Afganistán, Dinamarca fortalecerá «16 misiones y 9 departamentos en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores en Copenhague», pero a cambio se cerrarán otras dependencias que tienen menor relevancia en este contexto.
Kofod se refirió al «grave acontecimiento ocurrido en Afganistán durante las últimas dos semanas» que lo obligó a plantear «una nueva estrategia de política exterior y de seguridad».
Su cartera realizó «el análisis más completo del trabajo y la estructura del servicio exterior danés desde la Comisión de Asuntos Exteriores en 1989/90, al final de la Guerra Fría», y esta fue la conclusión, explicó.
Los intereses de Dinamarca, y de los daneses que vivan en Argentina, Uruguay y Paraguay, serán atendidos por una red de cónsules honorarios, explicaron las autoridades.
Fuente: Minutiuno