«Ninguna democracia funciona sin moderación», sostienen en el entorno del primer candidato a diputado por la Ciudad Martín Lousteau. La afirmación es una declaración de principios, pero bien podría funcionar como estandarte de la campaña que, por estos días, se aprestan a retomar los radicales, socialistas e independientes del frente Evolución. Bajo ese paraguas buscarán escaparle a la polarización -«la grieta»- y destronar al kirchnerismo del segundo puesto, un desafío que si bien es difícil, no ven como imposible.
Según el análisis que hacen las oficinas de la calle Costa Rica, en Palermo, donde Lousteau tiene su comando de campaña, el arrollador triunfo de Elisa Carrió en las primarias no es concluyente: en el pasado, los porteños «han tendido a equilibrar el poder», aunque reconocen que hay que remontarse hasta 1983 para encontrar un escenario de polarización a nivel nacional como el que actualmente se vive.
Este fin de semana Evolución recibirá las primeras encuestas y tendrá el análisis pormenorizado de la elección de agosto. Sin embargo, un primer dato con el que ya cuentan lo alienta: el 13% que los ubicó en el tercer lugar fue homogéneo en todas las comunas, por lo que la lectura que hacen es que se trató de «un comportamiento bastante estable, de un electorado que votó eligiendo y no escapando».
La polarización en las PASO es un dato de todo el país y no exclusivamente porteño: bien visto, a Lousteau le pasó en capital lo mismo que a Sergio Massa en la Provincia, aunque ambos candidatos rehúsen a esa comparación.
Atento a ese resultado, luego de que en la primera parte de la campaña apuntara sus cañones al jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta, Lousteau apuntará en esta etapa a alzar su voz en los debates nacionales para estar más a tono con «un estado de ánimo de la sociedad». Sin embargo, en su entorno aclaran: «No vamos a cambiar el estilo. No es un tema de espacios ocupados: queremos crear ese espacio de la moderación porque es nuestra convicción. Vamos a proponer un futuro».
De cara a octubre, y a tono con una campaña más nacional y menos municipal, Lousteau reducirá la cantidad de actos y caminatas y buscará en cambio actividades «creativa» con mayor impacto.
