Este domingo, la comunidad católica del barrio El Rincón vivió una fiesta ya que once niños, pertenecientes a la Catequesis Familiar, tomaron su Primera Comunión. En la ocasión, el padre Gastón Cuello señaló, «Jesús nos dice no te esclavices».
Tras más de dos años de preparación, las familias vivieron con mucha alegría la Primera Comunión de sus hijos.
Durante su homilía el padre Gastón Cuello expresó, «Jesús siempre va un paso más allá; eso nos enseña el Señor, debemos ir un poco más allá. Desde chico tenía esto».
«Cuando estaba en la Universidad, los estudiantes nos levantábamos contra una ley que nos perjudicaba, en casa me decían que no vaya a las protestas; pero yo iba. Les cuento esta anécdota, porque aquel que sigue a Jesús se debe comprometer con la realidad que le toca vivir. Ustedes – por los niños- se deben comprometer con la realidad, fundamentalmente ser obedientes con Dios», sentenció.
Refiriéndose puntualmente al sacramento de la Comunión, el presbítero indicó, «hoy -por el domingo-, los niños recibirán a Jesús; y no debemos olvidarnos que para tener vida hay que comer el cuerpo de Jesús. Cada vez que pueda, debo recibir a Jesús, porque él me transformará, y me iré pareciendo más a él».
Sobre el evangelio del domingo, el padre Cuello reflexionó, «cuando recibo el cuerpo de Jesús, yo también puedo hacer que otros puedan abrir sus oídos y la boca, para que puedan hablar, puedan expresarse».
«Hay muchas cosas que tenemos en el interior que no nos animamos a decir, pero cuando Jesús viene a nuestras vidas tenemos la libertad para hablar, para expresarnos», añadió.
En ese contexto comentó la situación por la cual atraviesan los docentes integradores, «resulta que la obra social, que tienen la mayoría de los empleados santiagueños, les abona un 50% menos el valor de sus honorarios y les paga de aquí a un año. Yo les pregunté que están haciendo para reclamar lo que es justo. Y no están hablando, no están diciendo las injusticias; y no pueden porque todos despendemos del Estado».
«Porque si hablamos podemos tener algún problema en nuestro trabajo, y todos estamos esclavizados, y que triste porque Jesús nos trajo libertad. Cuando hay un gobierno que nos tiene atados, no podemos ser libres«, sostuvo el sacerdote.
Renglón seguido no dudó en afimar, «Jesús nos dicte ábrate a la gracia, a la palabra. No te esclavices. Es feo vivir en una sociedad que nos esclaviza; que no podamos decir nada. No podemos servir a dos señores; Dios no quiere para él. Somos hijos queridos de él y no quiere que vivamos bajo opresiones».
Finalmente el padre Cuello, y teniendo en cuenta la proximidad de las elecciones PASO expresó, «ahora es el tiempo favorable, en las elecciones yo puedo decir quien quiero que me represente».
