Wanda Nara comenzó furiosa el lunes, porque su ex no fue a una reunión de padres. Como hace rato se transformó en rutina, escribió en Twitter: “Llegando a la reunión de padres… Que triste que teniendo un día libre se pierdan acompañar a sus propios hijos. Ni hablar de verlos”.
La frase se refiere a Maxi López, quien, tras el partido que jugó el domingo -en el que convirtió un gol- tenía un día de descanso, y la fecha coincidía con una reunión de padres en el colegio al que asisten sus hijos. Ante el faltazo del futbolista, Wanda estalló.
Harta de soportar durante mucho tiempo la forma de ser de su marido, la rubia tomó la determinación de divorciarse, pero los problemas no terminaron para la hermana de Zaira, sino más bien se transformaron. Es que ahora, feliz con su nuevo amor, Mauro Icardi, golpea por las redes sociales al padre de Benedicto, Valentino y Constantino no sólo por su pasado infiel, sino porque, según ella, nunca fue un padre presente.
Según le contó a “Crónica” la abogada de Nara, Ana Rosenfeld, la rubia está molesta hace bastante por la conducta de López, ya que no puede entender por qué lo hace, y agregó que los niños “son muy chiquitos y preguntan por su padre”.
Un eje extraño en el conflicto es que, hace dos semanas, López estuvo varios días con sus pequeños y, según Wanda, no quiso devolvérselos, hecho por el que la botinera se enojó mucho. El tema actual es justamente por el motivo opuesto. De no querer separarse de ellos a no querer verlos, como si se tratara de un juego de poder u odio en el que los únicos que pierden son los chicos.
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