Organismos científicos alaban esta práctica y, según explican, libraría tensiones, disminuiría los riesgos cardiovasculares, aumentaría la capacidad de atención y reforzaría el estado de alerta.
El último estudio que reveló los beneficios de dormir un corto período de tiempo durante la tarde fue nada menos que la Agencia Espacial Norteamericana (NASA), que asegura que lo ideal es dormir durante 26 minutos.
Según explican, el estudio reveló que dormir 26 minutos ayuda a mejorar un 34% el rendimiento de los trabajadores y refuerza el estado de alerta un 54%.
Y si bien para los adultos es beneficioso, para los ancianos y niños es algo necesario ya que, para los menores de 5 años, de esta manera se mejora el desarrollo físico y necrológico. Mientras que para las personas de la tercera edad podrán aguantar mejor durante el día y tendrán una mejor calidad de vida.
Eso sí, las siestas largas no son buenas como las de, en este caso, 26 minutos. Cuando se duerme mucho durante la tarde se pueden llegar a alterar los ciclos de sueño y, después, sufrir de insomnio durante la noche.
