Amalia Granata comenzó un romance con Martín Redrado y esta noticia tuvo una gran repercusión en los medios. Este miércoles, ella pegó el ‘faltazo’ al programa Chimenteros, donde trabaja como panelista, porque viajó a Uruguay por un compromiso laboral.
«Estoy bien, justo estoy embarcando, recién prendo el teléfono lo tuve apagado. Recibí casi 87 llamados… Mañana regreso. Es un compromiso que tenía, es una gala a beneficio por la lucha contra el cáncer de mama, voy a participar en Uruguay», aseguró en una conversación telefónica con el «Teto» Medina.
Pero aclaró que avisó sobre este viaje a último momento a la producción del programa de Magazine porque con tanto lío se había bloqueado. Además, señaló que no se esperaba la gran repercusión que tuvo su romance con el economista:»Estoy un poco colapsada, no es lo que quería, no lo queríamos en realidad, no me lo esperaba, lo entiendo mucho, porque trabajo hace 10 años y lo entiendo muy bien. Pero es difícil cuando te pasa y la verdad que necesito irme».
Luego, desmintió los rumores que señalaban un alejamiento del ex de Luciana Salazar: «No, nada que ver. Estamos muy bien y ahora más afianzados que nunca, para poder salir de esto lo mejor posible». Aunque tiene un perfil mediático, manifestó que le cuesta la gran exposición que está teniendo en los últimos días: «Yo entiendo el juego, cuando te toca vivirlo en carne propia es difícil. Más que nada porque hay otras personas involucradas. Cuidarme a mí, quiero cuidar a mi gente, a mi hija, a otros hijos».
«Yo puedo confrontar y discutir, el juego mediático lo conozco y lo manejo con mucha cintura desde hace más de 10 años. Pero no quiero explicar problemas personales de mi vida, porque es mi vida y no tengo que dar explicaciones, ni sentarme en un banquillo de acusados a contar lo que hago en las cuatro paredes de mi casa», agregó.
Por otra parte, afirmó que todavía no conoció a los hijos de su nueva pareja: «No, tampoco es el momento. Esas cosas se dan naturalmente y con el tiempo. No se pueden apurar los tiempos. Dejen en paz a los chicos, saquémoslos del medio. Eso me pone furiosa».
